La historia de los videojuegos es dilatada, y da lugar a muchas ideas y temáticas diferentes en su trayectoria. Los avances en la tecnología y un mayor mercado potencial han hecho que su producción se dispare, y que haya que ser más original cada vez para enganchar al público. Hoy veremos algunas de las ideas más ocurrentes que han servido de argumentos para los títulos. Las hay para todos los gustos.
Los simuladores han sido una constante en la vida de los videojuegos: desde los aviones a los “skaters”, encontramos infinidad de ejemplos de ellos. Pero lo que nos podríamos imaginar es que en 2014 se crease el Goat Simulator, un juego en el que nos poníamos en la piel de una cabra para movernos por el mundo. Si bien algunas no se acordarán del juego, hay que decir que tuvo un notable éxito y abrió las puertas a otras excéntricas ideas, como I Am Bread, un simulador de rebanada de pan de molde.
La llegada del año 2000 nos trajo una saga que ha tenido una larga vida y que, en su momento, resultó de lo más original. Hablamos de Los Sims, un simulador social en el que creamos una serie de personajes y las vamos distribuyendo, controlando sus actividades para que tengan un correcto estado de ánimo y evolución. Dicha originalidad ha sido premiada por las usuarias, aupando la saga a la primera posición de ventas para PC (en categoría de franquicia). Tan sólo el Sims 4 ya llegó a los 30 millones de copias vendidas.
Y hablando de grandes franquicias, la de estrategia por excelencia, para muchas, es The Age of Empires. A día de hoy, se ha consolidado tanto que nos resulta pensar que es una idea original, pero en su momento representó una verdadera revolución. El primer título apareció en 1997 y desde entonces se han lanzado seis más y nueve expansiones. Inspirados en momentos históricos diferentes, su recepción tanto a nivel de crítica como comercial ha sido un verdadero éxito, con cinco de los títulos superando el millón de copias vendidas. Por otra parte, ha sido una inspiración para muchos juegos posteriores.
La simplicidad, en los años 80, era una de las pocas opciones que existían, a tenor de las posibilidades tecnológicas del momento. Eso hizo que la imaginación fuese un valor a tener muy en cuenta. No sabemos si las creadoras de Tetris (1984) eran conscientes de lo que tenían entre manos, pero a día de hoy es el segundo videojuego más vendido de la historia (tras Minecraft), con 170 millones de copias.
Los más actuales
¿Juntar coches y fútbol en un videojuego es posible? Lo es. ¿Y tener éxito con ello? Pues también. Está ocurriendo con el título Rocket League. No sólo es divertido y tiene una buena calidad, sino que funciona a tal nivel que se prepara un “crossover” con un juego como Fortnite; y, además, se está gestando una versión para móviles. Tiene, incluso, un apartado especializado para Rocket League en una web de apuestas, concretamente con Rivalry, una de las pocas especializadas en eSports. Lo cierto es que resulta muy entretenido y emocionante; es verdaderamente sorprendente.
Y hablando de juegos actuales y de éxitos, lo de Among Us fue un verdadero escándalo hace un par de años. Unos gráficos muy espartanos para una temática bien sencilla. Una versión electrónica multijugadora del “Juego del Asesino”, donde la clave es desconfiar de todas para encontrar, en este caso, a la saboteadora, con unas personajes de colores que, incluso, han generado merchandising. Su popularidad se disparó gracias a las redes, donde se retransmitían partidas de diversas “streamers”; en el caso de TikTok, antes del final del 2020 ya se habían visualizado 13 mil millones de visitas a contenidos relacionados con este juego.
Volviendo a los coches, la saga Mario Karts (y, evidentemente, la de Mario Bros) es una de las más longevas y apreciadas por las usuarias. Parecía que poco quedaba que inventar en un formato que ya resultaba muy atractivo por su jugabilidad y su emoción. Pues bien, Nintendo ha querido elevar la apuesta y sacó el año pasado el Mario Kart Live: Home Circuit. ¿Cuál es su aportación? Que se trata de lo que podríamos denominar “realidad mixta”, es decir, utiliza juguetes de la vida real para construir escenarios; coches a los que se dota de cámara y que discurren por circuitos que bien conocemos, como algunas habitaciones de nuestra casa. Está disponible para Nintendo Switch.