Genial web publica bandas sonoras de videojuegos (gratarola)

Una de las aristas más interesantes y en las que pocas veces se repara a la hora de valorar un videojuego es la musical. No tengo idea de por qué, pero parece que algo tan fundamental y elemental como el sonido a la hora de generar reacciones y sensaciones pasa totalmente desapercibido por los paladares más negros de la industria del videojuego. Bueno, tal vez te parezca exagerado que me ponga a auditar a las auditoras, pero yo lo creo necesario, porque resulta que no son inocuas. Siempre que vemos las grillas de puntaje sólo se observan allí cosas vinculadas a jugabilidad, gráficos, entretenimiento, horas de juego, dificultad y variables similares. Creo que no he visto NUNCA una grilla que contenga valoraciones sobre la música, creatividad, o sobre la historia/trama de un juego.

A lo que me refiero: en el resumen general ese valor no figura. ¿Y por qué quiero que lo haga? Porque creo que un juego debe ser bueno por lo que produce y no por lo que trae consigo. Si bien el universo de los gráficos y efectos sonoros puede ser muy sorprendente, a la larga te acostumbrás a cómo se ve todo, y si creés que no, mirá la historia de los videojuegos y vas a encontrar cosas nefastas a nivel gráficos al punto de que en algún momento de la historia no eran tenidos en cuenta para evaluar cuán bueno o malo era un juego. Pero lo que hace que un juego sea divertido o no, que la pasemos bien o no, no son los gráficos, ni las horas de juego, ni la dificultad, ni los FX ni la pantalla de 50 pulgadas. Todas esas artistas producen acostumbramiento. La música y la diversión no lo hacen. Es por eso que juegos como Maniac Mansion, X-Wing o Mario Bros son hoy tan divertidos como el día en que salieron del horno y pueden hacerse tantas nuevas variables. La “fórmula” de estos juegos no produce acostumbramiento (aunque Mario flaquea cuando sus niveles son inferibles o en versiones en que la aparición de algún personaje genera cambios gráficos en los escenarios y eso los hace previsibles). Bah, pero todo esto lo digo de vieja que gusta de los juegos divertidos y no de los juegos lindos.

El asunto es que hoy te traemos una web de esas que vuelan la peluca y que invitan a redescubrir las cosas. Se trata de SNDTST un sitio que recopila una importante cantidad de canciones que seguramente hayas escuchado durante horas sin notarlo en las que se destacan hits como “Player Two has entered the Tournament!” o “Goro’s Lair” pero también “Grabbag” o “I Sawed the Demons” entre muchas.

La iniciativa me parece verdaderamente genial: reunir en una web las bandas sonoras de los videojuegos. Es curioso como mucha gente cree que una canción que suena sencilla es fácil de interpretar y más fácil de crear y termina no asignando valor a algo que requiere todo lo contrario. Porque la simpleza, la sencillez, lo fácil de digerir que puede ser una canción es todo un desafío, pero más difícil es cuando tenés sólo 8 bits de resolución del sonido y sólo algunos Kbytes de espacio para guardar tu obra. Si una canción suena bien en ese contexto y logra su cometido (que es meterte más en el juego en que estás ya metida), es definitivamente un gran logro.

La colección está dividida por consolas en 11 categorías: Arcade, Game Boy, Game Boy Advance, Genesis, Master System, MSX, N64, NES, PC, SNES y Turbo Grafx-16, en las que no vas a encontrar sólo música de 8 bits, mucha de ella cumple con estándares musicales actuales. El 99% de las bandas sonoras que se ofrecen pertenecen a juegos de plataforma.

Para escuchar un disco basta con elegir la consola para la que fue producido el juego y luego buscar el título en cuestión o ingresar algunas palabras en el buscador. Luego de encontrarlo basta con clicar el título para ingresar en la lista de reproducción que en muchos casos además contiene información sobre la autora y el disco específicamente, un detalle que desde aquí felicitamos.

Por último destacamos algunas propuestas incluidas en SNDTEST. La web te invita a pulir tu oído y tu memoria adivinando a qué juego pertenece una canción o haciendo mezclas de bandas sonoras.

Además de armar un sitio completamente en HTML5, una de las mejores decisiones que ha tomado Jason Sperske, la creadora del proyecto, es la posibilidad de escuchar en streaming o bajarte el disco en cuestión. Metete y volate la peluca.

¡Happy Hacking!