Facebook se disculpa usando un mensaje discriminatorio

Algo que temen las corporaciones es que las dejemos. Y Facebook se encuentra justamente en ese punto. Viene siendo golpeada intensamente por otras alternativas que han sabido captar mejor el interés de las usuarias. Twitter se ha negado públicamente a colaborar con el gobierno estadounidense (aunque nunca vamos a saber cuándo realmente una de estas corporaciones está colaborando ni con quien), Snapchat se popularizó hasta el hartazgo entre jóvenes que veían que Facebook una puerta de entrada de las adultas a un mundo en que quieren tener privacidad, que es algo que además Facebook no les garantiza.

Como plataforma de vídeos ha resultado ser un total fracaso y a sabiendas de eso decidieron abrir la puerta a YouTube. El asunto es que con la masificación de los celulares con cámara, la cantidad de gente que está interesada en compartir y expresarse con imágenes es verdaderamente importante, y ahí Facebook siguió perdiendo frente a Tumblr y Pinterest, a quienes ha terminado abriendo también la puerta. Con abrir la puerta, me refiero a que Facebook ha terminado adaptándose a estas redes en lugar de levantarles un murallón y competirles, que es lo que ha hecho históricamente, por ejemplo, con los productos de Micro$oft y muchos otros productos de Google.

Así es que cuando su competidora principal era el MSN Messenger decidieron incluir un simple chat que, sumado al promedio general de permanencia en la red de Zuckerberg terminó enterrando el mensajero de las ventanitas y todos sus similares. Lo mismo sucedió con Skype, al que le pusieron a competir una función de llamada de vídeo desde Facebook mismo con le objetivo de que la gente no se vaya de la red ya que tenía la posibilidad de estas llamadas dentro de ella. Uno de los casos fuertes es WhatsApp, empresa que terminó adquiriendo Facebook y en la que ya pueden verse las prácticas de una empresa que se dedica a vender la identidad de las personas que ahora tiene posibilidades de acceder directamente a tu teléfono.

Todo esto se da en un marco en que la munda está totalmente cansada de que la investiguen y en el que Facebook ha mantenido abiertamente una postura colaboracionista con los gobiernos y protagonista del mal uso del poder. Tal es el desgano con estas corporaciones que desde que se conoció el escándalo alternativas a estas redes y servicios no han parado de crecer. DuckDuckGo, SpotBros y varias de las otras son ejemplos de eso. Algo llamativo, es que usuarias de habla hispana, que siempre se han negado a pagar por los servicios digitales, hoy se vuelcan más a comprar, para poder ganar privacidad. Por otra parte, Facebook no ha sabido mixturarse con el universo móvil, y hoy el porcentaje de usuarias 100% móvil es altísimo, y eso la está enterrando.

De un tiempo a esta parte Facebook experimenta problemas de estabilidad, y lo que es peor, de velocidad. Así es que en un mundo de inmediatez cuesta abrir una red con mala imagen y encima desprestigiada, y luego es muy lento usarla. Todo lo anterior, supongo, ha llevado a la red antisocial de Zuckerberg a poner un cartelito en su página central con el objetivo de mejorar su imagen tanto en la entrada como en la salida de la red.

Ese espacio de la home fue uno de los que más le costó a Zuckerberg abandonar. Cuentan quienes han visto crecer la corporación que una de las batallas principales era la gratuidad y la incorporación de publicidad en ese negocio, algo a lo que Zuckerberg se habría negado en reiteradas ocasiones, pero a lo que finalmente accedió. Pero hoy, allí, en ese lugar de la publicidad y la discordia, nos encontramos con una pareja que está claramente entrando en un lugar. La puerta está a la izquierda, lo que según el modo de lectura occidental implica que el destino al que intenta arribar esa pareja se encuentra a la derecha, al mismo tiempo que la integrante que se encuentra más adentrada en la página claramente está deteniendo su paso, lo que implica quedarse.

Captura de pantalla de 2015-09-30 10:40:18El texto dice “¡Gracias por darte una vuelta! Esperamos verte pronto.” y luego puede verse el logo de la corporación a modo de firma. El asunto aquí es que la pareja es una pareja heterosexual y de piel morena. Están vestidos con ropas sueltas y coloridas, ella tiene el pelo largo y moreno, algo de panza, él es un poco más alto, también moreno, de pelo corto. Ninguno lleva barba ni bigote tupido, ambos sonríen, la expresión de ella es claramente de satisfacción y la de él lo es de alegría o excitación positiva.

Facebook pretende pasar por alto la realidad de que han utilizado un solo color de piel y si hay algo que tenemos en américa latina son miles de colores de piel. Y esta corporación no ignora esta realidad. Recientemente se incorporaron emojis en WhatsApp -de la misma empresa- que nos permiten variar los colores que comienzan en un amarillo y terminan en un marrón oscuro con el objetivo de poder enviar emojis con un color similar al de nuestra piel.

En lo personal, soy una latina orgullosa de su color de piel, de su cultura, de todo lo que tiene puesto y he tenido el gusto de sentirlo estando parada en pleno broadway. Tengo pocos pelos pero son tirando a castaño claro y soy de tez que en muchos países latinos llamarían “blanca”, pero ahí, en el corazón de EEUU me di cuenta de que a pesar de que en Argentina existe el dicho de que venimos de los barcos (una barbaridad con la que en argentina la gente pretende desprenderse de un hermosísimo pasado originario, que tenemos todos) y de que yo no me había cuestionado a mi misma como latina, lo era, y no sólo era un descubrimiento, además era genial, un motivo de orgullo. Sí, necesité que me discriminen por latina para poder estar orgullosa de serlo.

Es sabido que las corporaciones utilizan diferentes maniobras para sus mensajes focalizados y que justamente Facebook es una de las que se especializa en geolocalizarte al igual que Google, por lo que no llama la atención que se incluya una pareja en esas acciones y con esas características en un momento en que la red antisocial está por el piso. Lo llamativo aquí es que se trata claramente de una visión norteamericana y discriminatoria de parte de la corporación para con las usuarias latinas. No por señalar nuestro color de piel y nuestras características, sino por transformarlo en un mensaje determinista, racista y generalizante que desconoce la principal característica del universo latino: la heterogeneidad.

Si prestás atención, en los mensajes supuestamente universales vas a encontrar alrededor de 5 componentes que por lo general apuntan a cada uno de los continentes y sus características. Esos conceptos no son producto de la búsqueda de igualdad y justicia, sino de acciones de márketing. Así es que entre una multitud de jóvenes se destacan uno de piel muy blanca, otro de piel amarilla, otro de piel morena, otro de piel oscura, y así hasta cubrir el cupo que el sistema plantea como ético. En este caso no existe nisiquiera esa discriminación tan pop y propia de la publicidad.

Esperemos que este tipo de prácticas terminen de enterrar la red de Zuckerberg y que quienes coyunturalmente no tenemos la sartén por el mango comencemos a cuestionar que se nos intente quitar nuestro principal punto de unión que es el de ser todas diferentes sin que eso signifique un problema.

En esto, quienes vivimos en Argentina, tenemos mucho camino por desandar.

¡Happy Hacking!

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