Salvo excepciones (como es el caso del software de reconocimiento de voz instalado en nuestros Android) la mejor forma de ingresar texto en una máquina es el teclado. Pero en ocasiones no tenemos ganas de escribir. Por suerte, existen apps como la de hoy que, aunque incurren en errores ocasionales por lo general producto de la forma en que pronunciamos, funciona muy bien. Del cúmulo de herramientas disponibles (siempre estamos probando alguna para estas cosas) hoy te recomendamos SpeechTexter, una app que trabaja directo desde Chrome y hace que no sea necesario instalar nada más.
Se trata de una app basada en inteligencia artificial (como antes, aquí sostenemos que algo artificial no puede ser inteligente, pero ése es otro debate) en forma de herramienta de dictado online. Es muy interesante y potente ya que utiliza el motor de reconocimiento de voz que usa Google. Sus desarrolladoras aseguran que el nivel de precisión está por encima del 90%, aunque siempre se ve afectado por cuestiones ambientales (como el ruido), la calidad del micrófono, nuestro acento y algunos escollos afines. El idioma de reconocimiento se puede cambiar de un sólo clic, algo muy cómodo realmente. SpeedTexter trabaja con unas 20 variantes del castellano, algo que tampoco es menor.
En cuanto a restricciones, la única técnica mayor es su compatibilidad con Google Chrome. Luego de ingresar pro primera vez el navegador te pedirá permiso para acceder al micrófono y luego de darlo… sólo te queda empezar a hablar. En lo que respecta a seguridad y privacidad, no tenés que olvidarte que toda nuestra información pasará por los servidores de Google, por lo que si tu texto es particularmente sensible, tiene algún dato confidencial o por el motivo que fuera requiere que vos puedas decidir quién se entera de tu vida privada… podés ir renunciando a todo eso.
El hecho de que exista software que reconoce casi el 100% de las palabras que pronunciamos pero no se comporte igual con la ortografía… es una prueba de para qué están hechos estos programitas. No es un dato menor, pero si así y todo querés instalarlo, dale para adelante.
¡A divertirse!