encuentro nacional de mujeres en rosario 2016

La larga marcha de las brujas

Tribuna Hacker estuvo presente en el 31° Encuentro Nacional de Mujeres. Hoy vas a notar una dualidad en nuestra línea editorial. Hoy los hombres son hombres y las mujeres mujeres. Leé la nota -con texto de Walter Galleguindio Ramírez y otografías de Leila Verónica Duran y Eva Julia Durán- y enterate por qué.

Fui al 31 Encuentro de Mujeres, buscando la voz del Taller de Ciencia y Tecnología; pero al recorrer el camino hasta ese taller pude ver la capacidad de nuestras compañeras para compartir sus problemáticas y sus conocimientos. Entonces, decidí ampliar mi cobertura de este encuentro y encontré la gran generosidad de nuestras pares para contar, la alegría de estar allí. El día de la marcha, unas cuadras después de pasar la sede de los Tribunales Provinciales sobre la Avenida Pellegrini, le comenté a mi compañera qué maravillosa lección de civilidad nos estaban dando las mujeres en aquellos momentos.

Hubo pintadas, sobre los grises muros públicos repudiando muchas heridas ocasionadas a las mujeres durante décadas: las mujeres asesinadas por ser mujeres, el sometimiento del cuerpo femenino bajo la trata y el empleo sexual, la esclavitud laboral, el salario femenino que siempre es menor al masculino. Muchas de esas heridas sirvieron a militantes de otros colectivos que apoyaban la marcha, pero no la integraban para colar sus propias heridas.

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La marcha avanzó sin mayores sobresaltos hasta llegar a la Plaza 25 de Mayo; donde un grupo de militantes católicos (Marianos Opus Dei), se plantaron en el costado de la Catedral, de frente a la Plaza y de espaldas al Pasaje Peatonal que lleva a las fuentes con las obras de Lola Mora. Los medios oficiales de Rosario han dicho que sólo rezaban y que fueron agredidos por las manifestantes, culpando y ninguneando un Encuentro que desde todo punto de vista ha sido ejemplar.

La verdad que este grupo de orantes estaban allí para lograr lo que finalmente sucedió: custodiados por la policía -que no se metió en ningún momento- desde la provocación hasta que se desató la rabia. Muchas mujeres intentaron detener a las mujeres ácratas enfurecidas, pero ya era tarde.

¿Por qué sucedió esto?

Pues; porque la Iglesia es el simbolo más importante del Patriarcado y la institución que ha sostenido en el tiempo su sometimiento y la herida femenina.

Cirilo de Alejandría, Padre de la Iglesia, decretó que la mujer debía caminar dos pasos detrás del hombre. Hipatia fue filósofa y matemática neoplatónica griega, de orígen egipcio, que se destacó por enormes aportes en astronomía y matemática. Según Cirilo, inducía a las mujeres a ‘creerse’ iguales al hombre, lo que fue ‘resuelto’ por una turba de parabolanos asesinándola y despellejándola viva. Cirilo de Alejandría fue canonizado y hasta el presente se lo considera Padre de la Iglesia.

Desde el año 315 dC en adelante el cristianismo ha ocasionado un genocidio silenciado de las que no se sometían a sus lineamientos. En el año 359, en Siria los cristianos organizan el primer Campo de Concentración que servirá para aislar, torturar y ejecutar a las paganas arrestadas en el Imperio de Constantino.

Durante los veintiún siglos que llevamos recorridos las occidentales, la Iglesia ha perseguido a las mujeres que se niegan a someterse y al conocimiento compartido. Es la culpable directa de la quema de las bibliotecas de Grecia, Siria, Egipto, Alejandría y Antioquía; de la destrucción de todos los templos paganos de la antigüedad. La Iglesia Católica es la más extendida no porque obró la fe en Dios, sino porque sus métodos de evangelización fueron los del conquistador. Sembraron la muerte por todo el mundo conocido y lo llamaron evangelización.
También fue la Iglesia la que impulsó el asesinato estatal de las mujeres en la pira o el cadalso por producir conocimiento y compartirlo con sus compañeras en reuniones plagadas de música y alegría. Dijeron que esas reuniones eran orgías con Satán (jamás nombrarían a Lilith),las llamaron Aquelarre y a sus participantes brujas, magas y hechiceras.

 

A medida que nos acercamos al presente, no cambia la conducta de las instituciones esclesíasticas con las mujeres y sus derechos, ya son harto conocidos los casos de las Rosas rojas, de Rosa Luxemburgo, y tantas otras luchadoras por los derechos de la mujer.

En Argentina; la Iglesia fue un pilar fundamental de la Dictadura; y aún sus actores gozan de la protección de la institución. El 33% de las desaparecidas en Argentina fueron mujeres y de ellas estaban embarazadas el 10%, hubo un plan sistemático de apropiación de las bebés que hoy se van recuperando ya adultas, para restituirles su identidad. La Iglesia actuó como nexo muchas veces entre los Centros Clandestinos de Detención y las familias de apropiadores/as.

La herida femenina es mucho más profunda y sería demasiado extensa esta nota para describirla.

¿El hecho que provocó el caos?

Un grupo de no más de doce varones se planta frente a la Catedral de Rosario, a rezar el Ave María para esperar la llegada de la marcha del Encuentro de Mujeres, no hay mujeres entre los orantes. Las mujeres más radicalizadas que piden la no regulación de sus cuerpos por el Estado y la Iglesia los enfrentan; primero les piden que se vayan, después empiezan a agredirlos y finalmente se violentan. Es recién allí que interviene la policía protegiendo a los provocadores, y tratando de dispersar a las mujeres con su palos y balas de goma.

Todos los policías varones estaban con cascos, protección antimotines y palos; mandan a un grupo de mujeres policías a hacer una valla humana sólo con sus uniformes de servicio en medio del intercambio de piedras, fue entonces que caen dos de ellas golpeadas por los proyectiles lanzados por el grupo de mujeres encolerizadas, mientras el resto de la manifestación continuaba su recorrido hasta el Galpón 17 donde se realizaba una Peña de Cierre.

Una de las compañeras fotógrafas fue agredida por un agente que quiso romper su cámara con el palo desde la protección de su escudo, lo que originó que varias de las reporteras nos quejáramos y saliéramos en su defensa.

Al otro día; los medios del patriarcado tenían su noticia para tapar tres días de trabajo y un ejemplo de organización y civilidad que habían producido las mujeres allí reunidas.

Desde este medio nos solidarizamos con las compañeras, repudiamos la represión contra mujeres desarmadas que se hubiese evitado invitando al grupo de machistas marianos a rezar en el interior de la Catedral.

Y nos solidarizamos con las compañeras de prensa que fueron ayer agredidas en la plaza mientras cubrían los acontecimientos, así como repudiamos la intentona patriarcal de mostrar como violentas a las mujeres producto de que se está discutiendo el poder al patriarcado. Aquí, medios no sólo cómplices sino también artífices de la sociedad machista que brinda a las mujeres el rol de cosa (para comprar, vender, alquilar, destruir, esclavizar y tantos otros flagelos de las que nuestra sociedad hace víctimas a las mujeres).

También cuestionamos la ira de las compañeras radicalizadas, por alimentar los argumentos de los medios patriarcales contra un espacio que fue ganado durante 31 años y ha ayudado a coordinar las políticas y las alianzas de los distintos colectivos feministas.

En esta semana publicaré la entrevista con Silvina Fernandez, científica precarizada; las conclusiones que pudimos concordar con algunas docentes sobre el avance del Macrismo sobre la educación y como el software libre puede ayudar a estos encuentros.

Por ahora; sólo me queda el gusto amargo de lo que no debería haber sucedido.

Fuentes

Lista de víctimas en nombre de la Iglesia Católica
http://encuentrodemujeres.com.ar

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